Comenzó su relación con el cine viendo películas en su Villa Regina natal. Desde chico le gusto contar historias, en principio, haciendo dibujos pero luego se fue relacionando con el cine y con quienes comenzaron a incursionar con los documentales y la ficción en el norte de la Patagonia. Mario Tondato, realizador de ficciones como “Reventó el Chocón” y “El Curador” no contó sus comienzos en el cine y su visión del papel que debe cumplir en la construcción de la identidad patagónica.
Por Marcelo Miranda mirandamarcelofabian@gmail.com
¿Cuando te contactaste con los con los realizadores de cine Lorenzo Kelly y Carlos Procopiuk?
-Yo conocí a Kelly y Procopiuk en mis comienzos en el cine, sobre todo a Kelly que me aconsejó bastante. Acá no había escuelas, tenía que formarme solo y como ellos también vivieron esa experiencia me vino bárbaro tener un encuentro con esta gente. Con carlitos Procopiuk eramos compañeros en la Universidad (del Comahue). Yo arranqué a principios de los 90 pero carlitos y Lorenzo tienen que haber arrancado en los 60 pero no estoy seguro de ese dato.
También anduvo por la zona Prelorán (Jorge Ricardo Preloran, actor y director fue uno de los principales referentes del cine etnográfico argentino) que con el tiempo se convirtió en un referente del cine social, comunitario y político. Sus primeras armas las hizo con Kelly y Procopiuk, eso me lo contaron ellos. El empezó como ayudante de Kelly pero después se fue a Estados Unidos y tuvo otro vuelo.
¿Vos era dibujante y vivías en Villa Regina. Cómo empezaste a meterte en el tema del cine?
-De casualidad, porque yo provengo de una familia de obreros, provengo una clase social que usualmente no se dedica al cine. Los realizadores del cine argentino pertenecen de una clase social de alta para arriba y de Buenos Aires, de la Capital Federal. Todos los pobres tenemos un gran faro, poderoso y gigantesco que es Leonardo Fabio, que el nació en peores condiciones que yo. Nació en una villa y llegó a ser una estrella a nivel mundial. Los que venimos de abajo y no dedicamos al cine no somos muchos. El cine es bastante privativo porque demanda, por lo general, muchos fondos.
-Mi comienzo en el cine-fue de casualidad. Un amigo me prestó una cámara. A fines de los –años- 80 estaba en auge filmar sociales como cumpleaños de 15 o casamientos. Como las fiestas eran los sábados y domingos me dice “tenemos ahì los equipos y tenes toda la semana. Entonces nos empezamos a juntar a jugar. Yo me dedicaba mayormente a hacer historietas, comic, que es un pariente del cine. Es contar historias a través de imágenes. Primero contaba unos pequeños cortitos al principio y después fuimos creciendo.
Nosotros somos un rejunte, una zona donde ha venido a confluir gente de todos lados del mundo, no sólo del país. Entonces el cine ayuda un poco a eso de empezar a anhelar esas cosas nos definen o que quizás no existan pero por lo menos empezar a buscar. -Esas cosas- que nos dan un sentido de pertenencia con la tierra o con clima u otras cosas.
Rodaje de «El curador».
¿Como seleccionas los temas?
-En general, me gusta contar historias nuestras. Ahí tiene mucho que ver el legado de Lorenzo y Carlos, ellos me decían mucho eso. Cuando uno es pendejo tiene muchos vicios con la manera que estamos relacionados y colonizados culturalmente. Y los tipos decían “si, se puede hacer todo, pero siempre buscando una identidad”. Para nosotros es importante esa búsqueda por que no la tenemos o la tenemos muy incipiente. Somos una población nueva, no sólo en el norte de la Patagonia si no en la mayoría de las provincias. Sin embargo, en el norte, hay una tradición por que hay ciudades más viejas, hay mucho más folklore, hay otra relación con la propia cultura.
Nosotros somos un rejunte, una zona donde ha venido a confluir gente de todos lados del mundo, no sólo del país. Entonces el cine ayuda un poco a eso de empezar a anhelar esas cosas nos definen o que quizás no existan pero por lo menos empezar a buscar. -Esas cosas- que nos dan un sentido de pertenencia con la tierra o con clima u otras cosas.
Siempre hay un escollo para financiar estos proyectos. ¿Como te las arreglaste para financiarlos?
-Yo tuve la suerte de empezar a laburar donde se empezó a democratizar todo esto. Digamos que las cámaras empezaron a ser más accesibles. Justo cuando empecé, se dio esto que me prestaron la cámara, empezó el súper VHS y después pasamos al digital. Yo nunca tuve una fórmula, me las rebusqué. Vengo de un lugar donde hay que rebuscárselas para sobrevivir. Para mí nunca fue un escollo no tener guita para filmar. Una vez que en la Universidad –del Comahue- empecé a tener un espacio para desarrollar mi carrera en forma formal yo pude utilizar la estructura de la Universidad pude acceder a intercambios, ha través de trueque. Hay un montón de plata que me ahorro porque llego a un lugar y empiezo a conversar. Vos necesitas hacer una escena con camiones, si los tenés que contratar esos camiones te sale muchísima guita. Ahora si vos llegas y hablas con una empresa que tienen un par de camioncitos y los convences que van a estar en una película, eso causa algún tipo de ilusión. A veces te dicen que no, pero por lo general te dicen que sí.
De a poquito vas encontrando las cosas para las películas y las que no encontrás las adaptás, adaptás la historia que tenés a los recursos que tenés, intentando que no se note. Uno no tiene que hacer cine pobre y utilizar eso como una excusa porque tu historia no se contó como debió haber sido. “Atar con alambre “ significa “arreglate con lo que tenés” sin embargo, no sólo te la arreglas con lo que tenés si no que convertís ese recurso en el mejor recurso posible para contar tu historia.
Películas y documentales de Mario Tondato
- Revento el Chocón
- El regreso del lobo
- El curador
- El delator
- Cuestionario
- Trawnco
- Los cumbiancheros del oeste
- Hago calle
- Toska
Dentro de la Universidad funciona el Foro Cine Sur. ¿Qué función cumple?
-Mayormente, es producir cine. Después tenemos otras tareas relacionadas con la difusión de un cine que este relacionado con lo que implica una Universidad pública. Con un cine que no sea de entretenimiento si no que tengo algún contenido cultural, científico, social y político. Hemos hecho –en Río Negro y Neuquén- muchísimos ciclos de cine a lo largo de los 20 años que tengo en el foro. El hecho de desarrollar estas tareas relacionadas con el cine, dentro de un espacio institucional implica eso, nunca tuvo que ver con acceder a recursos económicos. Siempre, los recursos los tuve que buscar afuera –de la Universidad- A carlitos –Procopiuk- le pasaba lo mismo. Es muy difícil conseguir que la Universidad destine fondos. En general es por que los fondos no estaban.
¿Cuál es el panorama actual de la producción de cine en la zona?
-Hay un cambio porque hay dos escuelas de cine. Hay egresados, hay un plan de fomento, en Neuquén, en base a una ley. Es decir las cosas están muy distintas en comparación a antes. El problema que enfrenta el cine, como cualquier trabajo artístico en un país como el nuestro es la dificultad del acceso a los medios tanto como para realizar como para difundir las películas. Desde la pandemia, el acceso a las obras audio visuales sea a través de plataformas. Las plataformas son una saranda mucho más fina que lo que era antes las salas de cine.
Estoy por estrenar un documental la semana que viene, voy, hablo con la gente del cine Español y arreglo y listo. Pero eso se va perdiendo. La gente esta yendo cada vez menos al cine. Las películas que se estan dando son las de “montañas rusas” de grandes efectos, muy sensacionales, pero el cine, como arte, se esta perdiendo en salas. Acceder hoy que tus películas se den en una plataforma como Netflix o Amazon es prácticamente imposible. Estas personas compran paquetes de películas y esos paquetes se los compran, no a los realizadores, se los compran a productores. Tipos que manejan grandes empresas productoras de cine que comprar pero que acá, en la zona, no hay ninguno. En Buenos Aires hay, pero la mayoría esta afuera –del país- Todo se está dando para que todo el cine, que no es norteamericano, no llegue al público.